HASTA PRONTO NEPAL

15 Octubre'10 (de Dana a Tatopani)

Después de una buena noche de celebración y muchas risas que casi me dejan durmiendo en el balcón, recogimos todo tranquilamente y nos dirigimos a Tatopani.

Ufff, ...ya emprendíamos el regreso a casa...

Pasito a pasito fuimos dejando atrás este hermoso valle, lleno de grandes rincones por explorar...

...y en poco más de hora y media entrábamos en Tatopani, donde nos acomodamos en el mejor Lodge de todo el viaje "El Annapurna Hotel"

En su gran terraza dejamos secando todo el material...

y acompañamos a nuestros amigos en un segundo desayuno que recargaría nuestras escasas energías perdidas.

Como era pronto dimos un paseo hasta la Cascada de Tatopani para estudiarla, pero igual que vimos la primera vez y como en la mayoría de casos, su gran inconveniente es el cruce del Gran Río donde ésta desemboca.

Así que, como bien poco había que hacer, echamos el día íntegramente al estilo Nepalí.

En el Cyber

donde tecleábamos acompañados de Zumos de Cebada y de Naranja terminaditas de coger del árbol.

y cómo esta actividad en Nepal genera "stress internauta", un poco de meditación para relajar.

unos divertidos toques de balón-piedra...y algunas piruetas...

dentro de este mundo que siempre invita a la relajación y bienestar.

Hay que ver el hambre que da no hacer ni el "güebo" en todo el día, así queee ¿por qué seguir sufriendo? "vamos a la mesa"..Hoy sería nuestra última cena con Jero en Nepal.

Estaba un tanto nervioso, ansioso e intrigado por saber cómo sería su próxima aventura, donde en solitario con Sun, aún estaría unos 10 días recorriendo más allá del Reino de Mustang.

Le hicimos entrega de un bonito regalo que recogimos del suelo, jejeje, para que durante esos días nunca, en ningún momento, se sintiera solo.

Mañana nuestros caminos se separarían, pero solo por un corto espacio de tiempo...y es que es inevitable cogerle un enorme cariño a nuestro apasionado Livingston como le apodó Amanda, jejeje.

16 Octubre'10 (de Tatopani a Beni y de Beni a Pokhara)

Un día Duro y bastante Subrealista se levantaba hoy ante nosotros.

De primeras acompañamos a Jero a la parada del autobús, donde ahora si, la despedida era ya inminente.
.

Joer, qué penica nos entró a todos mientras le abrazábamos... "venga, venga... ¿pero qué penica ni que ná? que es él el que se quedaaaa!! ", jejeje.

Él rumbo al Norte y nosotros al Sur de camino a Beni. Un trayecto que según la estimación de Indra, nos llevaría 9 horas.

El recorrido aunque a tramos muy bonito, resultó ser excesivamente monótono, y es que los 15 km que nos separaban de nuestro destino, eran íntegramente por la misma polvorienta y transitada pista-carretera.

Y eso debieron pensar también nuestros porteadores que de pronto los vimos pasar en autobús...¡¡Anda,miralos qué espabilaos!!.

Nos invitaron a acompañarles, pero continuamos andando, siguiendo el curso aguas abajo del Gran Kali Gandaki que no perdía su fúria en ningún momento.

Encorbatado de libro, como comentó Caro.

Tomamos coordenadas y referencias de aquellos torrentes que nos íban llamando la atencíón.

El Velo de la Novia (así le llamamos a este salto)

Mientras cada vez nos acercábamos más a la civilización...

donde nos plantamos en 5.30 h contra el pronóstico nepalí.

Qué desastre!!..¿Ésto es Beni? La carita de Amanda lo dice todo...

¿Y aquí nos tenemos que quedar todo el día hasta mañana?.Un gran NO se reflejó en nuestras miradas.

Indra tal cual, nos aparcó en un Lodge, por llamarle de alguna manera, pues una porqueriza hubiera sido más limpia y acojedora que aquel asqueroso antro.

Sin más que comentar, Caro le transmitió a Indra nuestra decisión de irnos a Pokhara, y tras sus muchos inconvenientes, literalmente pasó del burladero y saltó al ruedo.

Buscó un taxi por el que nos pedían demasiado dinero, pero justamente estábamos en la estación de autobuses, así que localizado el correspondiente, le dijimos: "nos vamos"... y así, nosotros y ellos sin opción alguna, nos embarcamos rumbo a Pokhara.

No andamos mucho cuando nos encontramos con ésto.

Un autobús en la cuneta, un tractor con una cuerda intentando sacarlo, la carretera bloqueada y 40 personas mirando como NO lo conseguían...luego dicen de los españoles...

Como hasta ahora hemos visto, les falta mucha organización, cuando ésto les tiene que pasar día Si día También...

Así que nuevamente nuestro siempre dispuesto Expensive, tomó las riendas del asunto.

para conseguir que todos empujaran al mismo tiempo que el tractor tiraba...

Pero ésto es lo que pasó, la "liana" rompió y finalmente el tractor se apartó para dejar paso al resto de vehículos que esperaban.

Menudo viajecito más subrealista, y es que andar por las carreteras de Nepal es toda una aventura, un verdadero deporte de riesgo y no lo que nosotros practicamos.

Hicimos decenas de paradas durante las más de 5 horas de viaje; el autobús petao de peña y fuertes olores, que se dirigían a celebrar la gran Fiesta Nacional "El Dasai", motivo por el cual tuvimos que alterar nuestros planes de viaje, o eso nos dijeron.

El estado de la carretera, que circulaba siguiendo el curso del río, nos hacía aguantar la respiración cada vez que nos cruzábamos con otro vehículo; cuando hacíamos patinaje artístico por el barro, o saltábamos al paso de los acantilados que tienen como baches, mientras un joven subía y bajaba por el lateral del autobús asegurando contínuamente los bultos amontonados en el techo...¡¡Im-presionante!!

La tensión que aguantábamos al cruzar los montones de puentes de palos temiendo hundirnos, pues algo de eso ya sabíamos. Los puertos de montaña por los que movíamos a 10 por hora, y nos enfilábamos a 100 en sus bajadas al tiempo que nuestras caras se desencajaban...

Un brusco frenazo hizo que medio autobús se fuera hacia adelante y Amanda recibiera un buen golpetón...¡¡Por favor, que esto se acabe!!

Increiblemente llegamos a Pokhara y después de 30 min más, por fin tocamos tierra...Buff, nos faltó besar el suelo.

En 2 pequeños taxis llegamos al "Raraa Hotel" donde nos alojaríamos esa noche gracias a las gestiones de Suresh. Allí nos despedimos de nuestros compañeros de viaje, después de hacerles entrega de unos pequeños presentes y de las propinas correspondientes.

Tras una merecida ducha nos fuimos a cenar, a relajarnos con unas buenas birras y unas divertídisimas partidas de dados hasta que nos echaron como ya iba siendo habitual.

Aún nos quedaríamos un rato más en el balcón del hotel, hasta que otra vez nos llamaron la atención y al poco dimos por finalizado este in-tenso día.

17 Octubre'10 "El Dasai"

Hoy pasaríamos el día entero en Pokhara, donde aprovecharíamos para hacer algunas compras y relajarnos en nuestro último día completo en Nepal.

Tras un buen desayuno, nos trasladamos al Hotel Trek o Tel, el mismo en que nos alojamos 13 días antes...¡¡Joer cómo pasa el tiempo!!..¡¡Cómo nos hubiera gustado volver a empezar!!

Tras unas compras, Nuria y yo nos fuimos a que nos Manosearan durante una cortísima hora...Ay!!, qué gusto por favor!!. A eso le llamo yo un buen masaje.

Encantadas, relajadas y casi nuevas, salimos a buscar a Caro y Amanda por la ciudad entre el gentío que se movía de un lado a otro para celebrar El Dasai, la mayor fiesta Hindú del país.

Pasamos el nublado día, recorriendo las calles, parando a comer...

...de cháchara, tomando riquísimos Frappés, jugando a los dados, corriendo bajo el diluvio que cayó, trasteando por internet...

...eliminando el exceso de peso, jejeje

En fin, un día bueno y totalmente extremo al anterior, que nos cargó pilas para afrontar el próximo retorno a casa.

18 Octubre'10 "Hasta Pronto Nepal ".

Son las 8.15 am cuando 2 taxis nos recogen en el hotel de Pokhara... 3 vuelos y muchas horas nos esperaban hasta llegar a casa.

El Exceso de Peso sería el tema de conversación del día, pues aunque el coste por kg del vuelo Pokhara-Kathmandú no es elevado, el máximo permitido son 20 kg.

Menos mal que Nuria y Caro fueron muy audaces y al depositar las mochilas, la segunda apoyó "casualmente" sobre el mostrador de al lado, y así la vieron y la dejaron, haciendo que el total de los 4 bultos ascendieran a 88 kg, solo 8 más de los permitidos que nos dejaron pasar sin problemas, cuando en realidad llevaríamos al rededor de los 100.

Contentos pero sin cantar victoria llegamos a Kathmandú, aeropuerto que seguro no nos lo ponía tan fácil y además aún teníamos muchas compras que recoger en la oficina de la Agencia que dejamos antes de salir al trekking.

Dimos una vuelta por la zona de Thamel, y nos acercamos a la tienda oficial de North Face, donde los precios rondan alrededor de un 30% por debajo de los españoles.

Comimos estupendamente en "The Factory"

Y fuimos a la Office a preparar los bultos y pesarlos con la ayuda de Suresh que hasta nos trajo la báscula de su casa, jejeje.

Comprobamos que llevábamos para facturar 107 kg cuando solo nos permitían 92 entre los 4.

Por si un caso nos pedían demasiado dinero, y hubiese que dejar algún bulto para más tarde traer a España vía Cargo, Bidu muy amablemente nos acompañó, haciéndonos la espera un poco más amena entre cantos populares, repaso de vocabulario nepalí y hasta a contar en castellano que nos instruyó, jejejeje.

Ya en el mostrador, subimos los bolsones a la báscula y sin posibilidad de hacer trampa, les vimos la cara que ponían según ascendía la cifra.

Nos miró y nos dijo que había una bolsa que pesaba demasiado, exáctamente 34 kg, al tiempo que señalaba un adhesivo que prohibía más de 32. Le indicó a Caro que moviera algo de esa a otras bolsas de menor peso, pues el problema es que es excesivo para las personas que lo tienen que manipular...¿Entonces el máximo son 32 o 23 como indicaba nuestro billete?

No entendiendo nada, Caro saltó la báscula con intención de obedecer las instrucciones, pero el chaval encargado de manipularlas, lo frenó sin que el del mostrador lo advirtiera.

Al momento, cuando volvió con nosotras, el facturador se extrañó mucho de la rapidez, miró a su compañero quien le hizo gestos de que todo estaba OK, con lo cuál aquel siguió a lo suyo.

Aún estábamos haciéndole guiños y agradeciéndole su gran detalle con nosotros, cuando cruzó para identificarnos las bolsas de mano. Al tiempo y con gestos que nos solicitaba la "Tip" que confirmara nuestro real agradecimiento a espaldas del mostrador.

¡¡Joer, no nos lo podíamos creer, otra vez salvados por la báscula!!

Tras 13 horas de vuelo y 7 de espera en Doha (Qatar), llegamos a Madrid, donde con San Miguel en mano brindamos por lo FANTÁSTICO que ha sido...

NUESTRO PRIMER VIAJE A NEPAL...